

Cada 11 de febrero, el mundo celebra el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, una fecha que busca reconocer el papel fundamental de las mujeres en la investigación y promover la equidad de género en el sector.
La Dra. Karin Kopitowski, directora de la Subsecretaría de Investigación Socioeducativa de la Universidad Hospital Italiano de Buenos Aires UHIBA, y Silvana Figar, coordinadora del Área de Salud Poblacional de la institución y autora del libro Cómo escribir un artículo científico en medicina, destacan que las mujeres no solo contribuyen con el avance del conocimiento, sino que también aportan perspectivas valiosas en temas como equidad, justicia social y salud pública.
Un camino de oportunidades y desafíos
"Ser investigadora implica más que realizar experimentos y estudios. Es aportar una visión integral que considere factores sociales y culturales, además de los científicos", explica Kopitowski. Por su parte, Figar enfatiza que fomentar la participación femenina en la investigación "no es solo un deber ético, sino también una necesidad para el desarrollo sostenible y el avance del conocimiento".
Para reducir la brecha de género en el ámbito científico, las especialistas resaltan la importancia de las políticas de igualdad, las becas para mujeres investigadoras y los programas de visibilidad. Estas iniciativas contribuyen a eliminar estereotipos de género y a garantizar una mayor representación femenina en puestos de liderazgo.
Claves para inspirar a las futuras científicas
Con el objetivo de motivar a las niñas a interesarse por la ciencia desde edades tempranas, Kopitowski y Figar comparten cuatro estrategias clave:
A pesar de los avances, aún queda camino por recorrer para lograr una plena equidad en la ciencia. El desafío está en seguir promoviendo la educación, inspirar vocaciones tempranas y garantizar espacios equitativos para que las mujeres puedan desarrollar su potencial y continuar aportando al progreso del conocimiento.